bookmark_borderAtlas, el salto de Facebook al «onboarding».

AtlasHasta ahora, las «cookies» habían sido suficiente para hacer seguimiento de los hábitos de navegación de los usuarios. Los anunciantes tienen el problema de que no conocen al cien por cien si sus anuncios son efectivos o no, porque los anuncios basados en ellas no permiten enlazarlos con el comportamiento de los usuarios fuera de los navegadores. A esta dificultad hay que añadir los diferentes sistemas técnicos que han aparecido para eliminarlas o anularlas, lo que entorpece más la labor publicitaria.

Los usuarios no sólo utilizan el ordenador personal, sino que cada vez pasan más tiempo con su teléfono móvil, tableta y otros dispositivos. Esto provoca que si no se tiene información cruzada de su comportamiento en los diversos aparatos, no tenemos una imagen fiel de lo que son sus preferencias, y la publicidad es menos eficaz de lo  que pudiera desearse.

La plataforma Atlas, comprada por Facebook a Microsoft en 2013, viene a solucionar estos problemas, porque permitirá a los anunciantes comprobar si la visualización de los anuncios termina en una compra, aunque sea fuera de la página web de Facebook. Tal y como ellos dicen, harán «marketing basado en la persona».

Atlas-Offline

Atlas está especializado en la publicidad en dispositivos móviles y en enlazar la publicidad online con las compras en el mundo real. Facebook dispone de la mayor base de datos con preferencias de usuarios, y casi mil de los 1.300 millones de usuarios lo utilizan en el teléfono móvil.  Tras una buena puesta a punto de Atlas, Facebook podrá ahora hacer un mejor seguimiento del usuario para que la publicidad mostrada sea más eficaz, y además, comprobar si finaliza en venta.

Atlas-Across

¿Cómo lo van a hacer? El anunciante irá a la plataforma con un listado de detalles sobre el público objetivo que compró su producto, y Atlas cruzará esos datos para informar cómo los anuncios de Facebook influyeron en esas decisiones de compra. Se podrán cruzar datos de clientes de los que dispongan los negocios, tales como la dirección de correo o el número de teléfono, para cruzarlos con los datos que ya tiene Facebook, vía tarjetas de fidelización o programas de puntos.

La puesta en marcha de Atlas bajo el manto empresarial de Facebook supone su expansión a todo Internet. Esto, y la precisión que ofrecerá, les permitirá cobrar a los anunciantes bastante más que sus competidores, que todavía no han dado este paso.

En mi opinión, se trata de los primeros pasos de algo que es inevitable: el enlace de los datos que facilitamos con nuestra actividad en línea con el rastro que vamos dejando en el mundo real. Algo que está empezando a ponerse de moda en Silicon Valley, el «onboarding». Vamos camino del seguimiento absoluto de todas nuestras actividades. Y menos mal que todavía nos queda relativamente lejos el Internet de los Objetos, en el que nuestro entorno, que hasta entonces no transmitía ni almacenaba datos, empezará a hacerlo.

bookmark_borderJugando con el corazón de los usuarios

CupidoA primeros de julio saltaba el escándalo por los experimentos que Facebook lleva haciendo desde hace años con sus usuarios. Cuando se tienen millones de usuarios, algo hay que hacer con ellos. Experimenta con sus gustos, su comportamiento frente a determinados eventos… y gana más dinero. Hasta ahí, lo esperable, nadie da duros a peseta y la cuestión siempre es el negocio, y más cuando la moneda de cambio es la privacidad. Algo hay que hacer para monetizar y exprimir al máximo la información que se tiene.

Pues este lunes, la página web OkCupid, que se dedica a poner en contacto a parejas, ha confesado en su blog que también ha hecho experimentos. Con el llamativo título “¡Experimentamos con seres humanos!“, describe varias de las diferentes pruebas a las que ha sometido al personal.

Uno de ellos fue titulado “el amor es ciego, o debería serlo”. Primero lanzaron una aplicación para móviles que facilitaba citas a ciegas. Resultó un fiasco, porque tuvieron que retirarla a los 6 meses de ponerla en marcha. Sin embargo, el mismo día de lanzamiento de la aplicación, también eliminaron las fotografías de los interesados en el portal web, y tuvieron una interesante experiencia. ¿Qué efectos tuvo? Todas las estadísticas de la página bajaron durante la celebración del “Día del Amor Ciego”. Pero comparando los resultados con un día normal, se llegó a las siguientes conclusiones: la gente respondía más a un primer mensaje, las conversaciones fueron más largas y los usuarios se intercambiaban más rápidamente teléfonos y direcciones de correo electrónico. Resumiendo, la página funcionó mejor. Al restaurar las fotografías, el efecto pasó, y las estadísticas volvieron a las anteriores cifras.

En este caso, gracias al experimento se produjo un efecto no esperado que fue beneficioso para los usuarios: una mayor intensidad en la búsqueda de relaciones, y mayor eficacia.

Llevaban sin actualizar su blog desde abril de 2011 (¡…!). Está claro que han publicado esta información para ser noticia y aprovechar el momento. A día de hoy, tienen más de 1.000 comentarios y hay de todo, gente que está encantada, y gente que se lo ha tomado a mal… Vaya este ejemplo:

Pueden regodearse de sus experimentos con seres humanos, pero realmente, su página es una basura. Es una gran selección de hembras descontentas con cero interés en el sexo. Qué estupidez. Cojan sus servidores y dónenlos a la Iglesia Mormona. Con cariño, Floyd.

Me quedo con una de las frases del post de la empresa:

si utilizas internet, eres el objeto de cientos de experimentos en algún momento, en todas las páginas. Así es como funcionan los sitios web.

Desde el primer “clic” que haces en una página web, ya tienen tu dirección IP, que suele implicar la localización física de tu equipo. Tendrán también el recorrido que haces por la página. Si además te registras, tú mismo facilitas tu nombre, apellido y demás información personal. Añádele datos de medios de pago. Si es un sitio de contactos, como es el caso de OkCupid, te describes con todos tus encantos personales para tener gancho y ser más atractivo para el resto, te relacionas enviando correos “tentandores” con contenidos inconfesables… y así podemos ir incrementando lo que queramos. Todo eso da no sólo para analizar, sino también para poder experimentar con las reacciones ante determinados eventos o provocaciones que van dirigidas por los titulares de la página.

Hay que reconocerles que tienen ingenio. El post adecuado, en el momento adecuado. Generar ruido para ser más conocidos. Uno de los comentaristas ha “descubierto” que realmente este post es para promocionar un libro deChristian Rudder, uno de los cofundadores de la empresa: Dataclysm – who we are (When we think no one’s looking).  Para los interesados, a la venta el 9 de septiembre en Amazon.

Como lección aprendida, acordaros de que otras páginas al estilo más conocidas por estos lares, tipo EDarling o Meetic, por citar algunas, se estarán dedicando a lo mismo. Quien piense que esto no es así peca de ingenuo.